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Portada - El jardín funerario se encuentra dividido en pequeñas parcelas de 30 cm de lado, sobre las que se ha encontrado una capa de limo. (Fotografía: ABC)

Egiptólogos españoles descubren en Luxor un sorprendente jardín funerario de hace 4.000 años

Además de la momificación y de ser enterrados junto a multitud de ofrendas rituales, los antiguos egipcios solían crear pequeños jardines dentro de los sepulcros que decoraban con flores, plantas, árboles frutales y, a veces, hasta con fuentes. Pese a que conocemos su existencia gracias a la iconografía recuperada hasta el momento, lo cierto es que son muy pocos los arqueólogos que han podido toparse con uno de estos espacios tan especiales.

Sin embargo, la misión española Proyecto Djehuty, que excava desde el año 2002 en la necrópolis de Draa Abu El Naga, a pocos kilómetros de la moderna Luxor, ha descubierto recientemente uno de estos pequeños jardines, según informaciones publicadas por el diario ABC.

 

 

El coqueto huerto, de unos 3.900 años de antigüedad, ha sido hallado en un patio ubicado frente a una tumba que data del Imperio Medio, según ha detallado el Ministerio de Antigüedades de Egipto en un comunicado.

«El descubrimiento de este jardín puede ofrecer información sobre el medio ambiente y las técnicas de jardinería en la antigua Tebas (ahora Luxor) en la época del Imperio Medio, hacia el 2000 a. C.», ha señalado por su parte Mahmoud Afifi, director del departamento de Egiptología del Ministerio de Antigüedades egipcio.

El coqueto huerto, de unos 3.900 años de antigüedad, ha sido hallado en un patio ubicado frente a una tumba que data del Imperio Medio. (Fotografía: ABC)

El coqueto huerto, de unos 3.900 años de antigüedad, ha sido hallado en un patio ubicado frente a una tumba que data del Imperio Medio. (Fotografía: ABC)

Con un tamaño de 3x2 metros, el jardín se encuentra dividido en pequeñas parcelas cuadrangulares de unos 30 centímetros de lado, en las que se habría combinado el cultivo de plantas con el de flores. En el interior de cada una de las cuadrículas, delimitadas con adobe, los expertos españoles han detectado una pequeña capa de limo, consecuencia de haber retenido agua, lo que confirma el uso de la estructura como jardín o huerto.

Asimismo, en una de las esquinas del huerto se alzaba al menos un árbol — que daría sombra y cobijo a los sacerdotes encargados de las ofrendas funerarias — del que se han encontrado restos de la raíz y parte del tronco (unos 30 cm), preservados durante casi 4.000 años.

«Nunca se había encontrado (un jardín funerario así) en la Antigua Tebas. Si bien esta información era conocida a través de la iconografía, estaba muy poco documentada por la arqueología. Una vez más, nuestro yacimiento nos ofrece una nueva sorpresa, que nos permitirá realizar una aportación al conocimiento de la cultura y sociedad del antiguo Egipto», ha puntualizado José Manuel Galán, director de la misión Proyecto Djehuty y miembro del Consejo Superior de Investigaciones Científicas español (CSIC).

Cerámica, frutos y una capilla

Por otra parte, el equipo científico también ha desenterrado diversas y finas piezas de cerámica que debieron formar parte del ajuar funerario en el momento del  entierro. Un cuenco, encontrado boca abajo, ha logrado preservar, casi intactos, cuatro dátiles y otros frutos pendientes de identificación.

Encontrado boca abajo, este cuenco ha logrado preservar, casi intactos, cuatro dátiles y otros frutos pendientes de identificación. (Fotografía: ABC)

Encontrado boca abajo, este cuenco ha logrado preservar, casi intactos, cuatro dátiles y otros frutos pendientes de identificación. (Fotografía: ABC)

Además del pequeño huerto, los egiptólogos han sacado a la luz una pequeña capilla de ladrillos de adobe junto a la entrada de la tumba. De su interior han recuperado tres estelas datadas en la Dinastía XII (1800 a.C.). Una de ellas pertenecería a un hombre llamado Renef-Seneb, mientras que la segunda correspondería al «ciudadano Jemenit, hijo de la dama de la casa, Idenu».

«Estos descubrimientos apuntan a la relevancia del área central de Draa Abu El Naga como un lugar sagrado de una variedad de actividades de culto y religiosas durante el Imperio Medio», ha apostillado finalmente el director de la Administración de Antigüedades en el Alto Egipto, Hani Abul Azm.

Imagen de portada: El jardín funerario se encuentra dividido en pequeñas parcelas de 30 cm de lado, sobre las que se ha encontrado una capa de limo. (Fotografía: ABC)

Autor: Mariló T. A.

Imagen de Green Fairy

Mariló T.A.

Escritora freelance, bloguera y especialista en redes sociales, Mariló trabaja y colabora desde hace años en diversos medios de comunicación online. Apasionada de la naturaleza, los animales, la fotografía, la ecología, el biodinamismo, la espiritualidad, las civilizaciones antiguas, los viajes... Lee mas
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