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Ancient Origins España y Latinoamérica

Nuevo estudio apunta a la cría de conejos y liebres en la antigua ciudad de Teotihuacán

Los habitantes de la ciudad prehispánica mexicana de Teotihuacán podrían haber criado conejos y liebres para alimentarse, utilizar su piel y para fabricar herramientas con sus huesos, según un estudio obra de Andrew Somerville y sus colaboradores de la Universidad de California en San Diego (Estados Unidos) publicado el pasado 17 de agosto en la revista de libre acceso PLOS ONE.

Las relaciones entre seres humanos y animales a menudo implican la cría de grandes herbívoros, y fueron clave en el desarrollo de complejas sociedades humanas en todo el mundo. Sin embargo, había pocos grandes mamíferos adecuados para ser criados como ganado en la ciudad prehispánica de Teotihuacán, que se encontraba al nordeste de lo que hoy es Ciudad de México y que estuvo habitada entre los años 1 d. C. y 600 d. C. aproximadamente. Los autores han llevado a cabo el análisis de los huesos de 134 ejemplares de conejos y liebres hallados en la antigua ciudad, así como de 13 ejemplares silvestres actuales del interior de México, a fin de comparar su posible dieta y su ecología.  

Piedra azteca labrada con la figura de un conejo. Museo Antropológico de Ciudad de México. (Elainn / DeviantArt)

Comparados con los especímenes silvestres modernos, los autores descubrieron que los conejos y liebres de Teotihuacán presentaban valores de isótopos de carbono que indicaban niveles más altos de alimentos cultivados por el hombre en su dieta, como maíz por ejemplo. Los ejemplares con una mayor diferencia en sus valores de isótopos procedían de un complejo de Teotihuacán en el que se hallaron rastros de explotación cárnica de estos animales, además de una escultura de un conejo.

Dibujo de la escultura de un lepórido descubierta en el complejo de Oztoyahualco, Teotihuacán. (F. Botas; CCAL)

Aunque los antiguos conejos y liebres incluidos en este estudio podrían haber consumido al menos parte de las cosechas cultivadas invadiendo los campos de los teotihuacanos o comiendo plantas silvestres, los autores sugieren que sus hallazgos indican que es posible que los habitantes de Teotihuacán alimentaran, guardaran y criaran conejos y liebres por su carne, su piel y para fabricar herramientas con sus huesos, en lo que constituiría una nueva prueba de la explotación ganadera de pequeños mamíferos en Mesoamérica.

Escultura precolombina de un conejo. (Biblioteca de Investigación y Colección de Dumbarton Oaks).

“Al no haber grandes mamíferos disponibles para su domesticación en el México prehispánico, como por ejemplo cabras, vacas o caballos, muchos suponen que los nativos americanos no practicaban una explotación tan intensiva de los animales como las sociedades del Viejo Mundo,” explica Andrew Somerville. Y añade a continuación: “Nuestros resultados sugieren que los habitantes de la antigua ciudad de Teotihuacán comenzaron a explotar una fauna más diversa de menor tamaño, como conejos y liebres, y que esta práctica podría haber tenido una importancia similar a la de la cría de animales de mayor tamaño.”

Imagen de portada: Principal: Teotihuacán, México (BigStockPhoto). Detalle: Hacha labrada con la forma de un conejo, Veracruz (México). En la oreja del conejo se puede observar un conocido rasgo de estilo teotihuacano que representa el ojo de una serpiente emplumada. (Public Domain)

Fuente: PLOS. "Pre-Hispanic Mexican civilization may have bred and managed rabbits and hares: Ancient Teotihuacan rabbits, hares ate human-farmed crops, may indicate small mammal husbandry." ScienceDaily, 17 de agosto del 2016.

Este artículo fue publicado anteriormente en www.ancient-origins.net y ha sido traducido con permiso.