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portada: El mascarón de proa del Gribshunden tiene el aspecto de un monstruo o un perro. (Foto: Blekinge Museum)

Una Bestia de las Profundidades: Raro Mascarón de Proa de Madera Recuperado del Naufragio de un Antiguo Barco Danés

Un mascarón de proa de madera que representa a una figura con apariencia de perro o quizás de monstruo, se ha recuperado en aguas suecas procedente de un barco danés del siglo XV hundido en la zona. Es esta una de las tallas de madera de este tipo más antiguas y mejor conservadas que se conocen en todo el mundo. De hecho la madera es un material que se desintegra con relativa rapidez, excepto si se mantiene sumergida en agua, en cuyo caso se conserva razonablemente bien.

La nave de la que se cree que procede este mascarón de proa es el barco de guerra danés del siglo XV Gribshunden, que fue posiblemente un buque insignia construido por encargo del rey Hans de Dinamarca, que ocupó el trono del 1481 al 1513. Se cree que el barco, en el que viajaba Hans (o rey Juan) a Suecia en misión diplomática en 1495, ardió antes llegar a su destino. Hans, que vio arder al navío desde un bote cercano, canceló la misión. En años posteriores estalló la guerra entre Dinamarca y Suecia, ya que esta última deseaba independizarse de la Unión de Kalmar, de la que formaban parte Dinamarca, Suecia y Noruega. Los historiadores se preguntan si, en caso de haber tenido éxito la misión diplomática del rey Hans, se podría haber evitado la guerra.

 

 

Se ha encontrado madera carbonizada en el lugar del naufragio, reforzando la teoría que lleva a creer que el barco hundido es el Gribshunden. Los restos del barco naufragado, sumergidos en aguas cercanas a la costa meridional de Suecia, se consideran de vital importancia para la comprensión de la historia de la guerra en el mar.

Bala de cañón sobre la cubierta del Gribshunden; este podría ser uno de los primeros proyectiles de artillería destinado a servir de munición en un buque de guerra (Foto: Johan Ronnby)

Bala de cañón sobre la cubierta del Gribshunden; este podría ser uno de los primeros proyectiles de artillería destinado a servir de munición en un buque de guerra (Foto: Johan Ronnby)

Las aguas suecas en las que los submarinistas están trabajando para recuperar los restos del Gribshunden se consideraban aguas danesas en el siglo XV. El barco naufragado, descubierto por aficionados al buceo en los años 70, tiene un profundo significado histórico, según el blog Combat Archaeology.

“Como puede deducirse de lo dicho anteriormente, el Gribshunden es un descubrimiento único y extraordinario. Futuros estudios en el lugar del naufragio sin duda realizarán significativas contribuciones al conocimiento de la vida a finales de la Edad Media, especialmente en lo tocante a la navegación y a la guerra en el mar,” podemos leer en el blog citado más arriba.

Este vídeo de YouTube muestra al profesor Jon Adams realizando trabajos submarinos en el lugar de naufragio del Gribshunden

El barco medía 35 metros de proa a popa y su manga era de por lo menos 7,5 metros. Contaba asimismo con castillos tanto de popa como de proa. Era un tipo antiguo de embarcación construido empleando el método de la carabela, en el cual los tablones del casco se colocaban alineados, unidos por sus bordes en lugar de solaparlos como se hacía en la construcción del casco a tingladillo. Además del mascarón de proa, los submarinistas han descubierto también tres balas de cañón de 5 cm de diámetro y soportes en el casco para montar sobre ellos cañones de hierro forjado. También se encontraron proyectiles de ballesta entre los restos del naufragio en años anteriores.

La importancia del armamento de esta nave estriba en que pertenece a una época que vio nacer una nueva forma de hacer la guerra en el mar—empleando la artillería para destrozar los barcos enemigos a cañonazos desde la distancia en lugar de abordarlos y combatir cuerpo a cuerpo, como se había hecho desde la antigüedad.

Soportes para cañones pertenecientes al Gribshunden expuestos en el Museo de Blekinge (Foto: Mattias Mattison)

Soportes para cañones pertenecientes al Gribshunden expuestos en el Museo de Blekinge (Foto: Mattias Mattison)

“El material es, por tanto, un tema particularmente instructivo de la investigación en curso para el estudio del desarrollo del armamento naval, ofreciéndonos una perspectiva de los primeros pasos que dieron los buques de guerra para liberarse de la atadura medieval que suponía tener que decidir las batallas mediante acciones de abordaje,” leemos en Combat Archeology.

“El importante paso que supuso la posibilidad de abrir fuego de artillería pesada desde los barcos inició una nueva y significativa etapa en la historia del armamento, ya que de él surgió una forma de hacer la guerra estrictamente impersonal. La mortal violencia, generada desde la distancia y la lejanía, era una idea completamente nueva, que tuvo interesantes repercusiones psicológicas cuyo resultado fue que la violencia se tornara aún más extrema. El Gribshunden, cuando se compara y contrasta con otros barcos naufragados de la época– como el Mary Rose (1545), el Elefanten (1564), el Mars (1564), el Vasa (1628) y el Kronan (1676) – tiene el potencial de revelarnos increíbles descubrimientos relacionados con la trayectoria general del desarrollo de la guerra en el mar, e incluso con las instituciones sociales subyacentes que gobernaban y al mismo tiempo eran influenciadas por estos avances tecnológicos.”

Marcus Sandekejer, del museo de Blekinge, en el que será expuesto el mascarón de proa a finales de Agosto del 2015,  explicó a TheLocal.dk: “Este mascarón de proa es probablemente el único procedente de un barco del siglo XV que ha sobrevivido hasta nuestros días en todo el mundo. ¡Quinientos veinte años bajo el agua, y qué bien se ha conservado!”

La talla de madera ha sido sumergida en un baño de agua azucarada para eliminar la sal que pudiera contener, a fin de evitar de este modo una posible corrosión en el futuro.

“Después de este tratamiento, buscaremos otras formas de mantenerlo en buen estado a largo plazo,” afirmó. “Llevamos tiempo trabajando con arqueólogos de primer nivel que ya han realizado tareas de conservación de otros restos similares, procedentes de barcos como el Kronan, hundido cerca de Kalmar.”

Imagen de portada: El mascarón de proa del Gribshunden tiene el aspecto de un monstruo o un perro. (Foto: Blekinge Museum)

Autor: Mark Miller

Traducción: Rafa García

Este artículo fue publicado originalmente en www.ancient-origins.net y ha sido traducido con permiso.

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Mark Miller

Mark MillerEs un escritor de Ancient-Origins. Tiene una licenciatura en periodismo, es editor y escritor de periodicos y revistas, desde mucho se interesa de la antropología, la mitología y la historia antigua. Sus hobbies son escribir y dibujar. Lee mas
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